Una joven británica de 21 años y que se encontraba embarazada falleció este martes en las instalaciones del aeropuerto de Girona después de marearse y perder el conocimiento, según confirma el Servicio de Emergencias Médicas (SEM).

La víctima viajaba junto a diversos familiares, que la asistieron inicialmente mientras se procedía a la llamada al SEM, que informa de que el tiempo que precisó la ambulancia para llegar al lugar de los hechos fue de catorce minutos.

El sindicato UGT se plantea denunciar el caso después de que el Servicio de Asistencia Sanitaria de esta terminal aeroportuaria se cerrase hace un año.

El secretario general de Transportes, Joan Muntada, ha explicado que, por el momento, se ha solicitado "información de lo sucedido para analizar si los hechos son imputables" y se ha mostrado convencido de que así resultará.

Desde el SEM, una portavoz ha detallado que el aviso se recibió a las 15:24 y que la ambulancia llegó a la terminal a las 15:38, un tiempo considerado "dentro de los estándares" habituales en este tipo de situaciones de emergencia.

El cuerpo de la joven, que viajaba junto a sus familiares a Birmingham, se halla actualmente en el Instituto de Medicina Legal de Girona para proceder a la autopsia que revele las causas del fallecimiento.