El joven de Sonseca (Toledo) José Félix García-Ochoa, que permanecía ingresado en el Hospital Virgen de la Salud, de Toledo, murió a consecuencia de la brutal paliza que recibió el pasado 1 de marzo por parte de otros tres jóvenes, que se encuentran en prisión.

Así lo indicó el portavoz de la familia del agredido y amigo de la víctima, Enrique Arenas, que explicó que el fallecimiento del joven, que precisamente ayer hubiera cumplido treinta años, se produjo a las 22.45 horas de ayer. El joven había sido traslado a una habitación del hospital el pasado jueves, después de permanecer desde su ingreso en la UCI, aunque seguía inconsciente y su estado neurológico era preocupante. José Félix García-Ochoa fue enterrado por la tarde en el cementerio de Sonseca.