María Salvo, histórica militante del PSUC, fundadora de la asociación Dones del 36 y expresidenta de la Associació Catalana de Pressos Polítics del Franquisme (ACEPF) -estuvo encarcelada durante 16 años durante el régimen de Franco, y fue víctima de torturas y maltratos-, ha fallecido este lunes, seis meses después de haber cumplido los 100 años.

La ACEPF informó de la muerte de Salvo, y destacó "los años que dedicó a la recuperación de la memoria histórica, la de las mujeres de la guerra y la memoria de la lucha contra la dictadura, sobre todo insistiendo en dar a conocer a la juventud lo que ha sido la represión franquista y que esta lucha por un mundo mejor no se acaba nunca". "Pagó un precio muy alto por su compromiso. Los 16 años que estuvo encarcelada, las torturas que soportó, las consecuencias que tuvo que sufrir, han marcado su vida", añade la asociación.

Nacida en Sabadell, a los 13 años ya trabajaba de portera en el barrio de Les Corts y fue una de las primeras militantes de las Joventuts Socialistes Unificades. Secretaria de propaganda de las JSU de Barcelona, a los 19 años partió hacia el exilio. Fue internada en los campos de concentración franceses y entregada en noviembre de 1939 a la Guardia Civil.

Tras reprender su actividad clandestina fue detenida en 1941 en Madrid. Sufrió torturas en la cárcel de Les Corts que le impidieron ser madre y fue condenada a 30 años de cárcel. Tras 16 años de encierro en Barcelona, Zaragoza, Madrid y Segovia fue puesta en libertad pero bajo pena de destierro en Santander, desde donde se dirigió a Barcelona para seguir militando en la clandestinidad en el PSUC y compartir su vida con su compañero, el guerrillero Domènech Serra.

En una entrevista en EL PERIÓDICO con motivo de la instalación de una placa que recordaba la cárcel de mujeres de Les Corts, explicó su experiencia en ese centro penitenciario que llegó a acumular casi 2.000 reclusas, algunas con sus hijos, en un espacio destinado a 150. "Era lo más deprimente que se pueda imaginar. La Modelo era gloria comparada con Les Corts", explicaba a la periodista Núria Marrón.

En las elecciones municipales del 2019, María Salvo ocupó el lugar número 41 en las listas electorales de Barcelona en Comú. La alcaldesa Ada Colau ha sido una de las primeras en dedicarle un mensaje de duelo.

María Salvo recibió numerosos reconocimientos en vida: la Medalla de Honor de Barcelona en el año 2003, el doctorado honoris causa por la UPC en el 2004 y la Creu de Sant Jordi en el 2005. En junio de este mismo 2020 se celebró un acto de homenaje organizado por el Ateneu de Memòria Popular y el Ayuntamiento de Barcelona, con la intervención de su biógrafo, el historiador Ricard Vinyes.

"Esta mujer no es histórica por los hechos que ella haya podido generar o por su capacidad de generarlos, como puede ser el caso de una gran legislatura, una eminante pensadora, una escritora sólida y brillante o una fundador. De ninguna manera, Maria Salvo resulta histórica en sentido moral", concluía Vinyes, en un texto de la revista 'Treball' redactado con motivo de este centenario. "Ha dicho a menudo que ellas fueron vencidas, pero no derrotadas", concluía Vinyes.