La Policía y RENFE han abierto sendas investigaciones para esclarecer las circunstancias en las que a primera hora de ayer mañana un joven ha muerto en la estación de Atocha tras ser reducido por cuatro vigilantes de seguridad, informaron fuentes de la compañía ferroviaria.

Los cuatro vigilantes fueron trasladados a la comisaría de Policía del distrito madrileño de Arganzuela para prestar declaración después de que los servicios de emergencias del SAMUR-Protección Civil certificaran el fallecimiento del joven.

Fuentes del SAMUR indicaron que sobre las 6.30 horas de recibieron una llamada desde la estación de Atocha y que, cuando llegaron, no pudieron hacer nada por salvar la vida del joven, que se encontraba en parada cardiorrespiratoria.