Cuatro inmigrantes subsaharianos fallecieron ayer ahogados cuando estaban a escasos seis metros de la costa de Fuerteventura. La treintena de ocupantes de la embarcación saltaron al agua pensando que la proximidad con tierra les permitiría hacer pie. El suceso remató otra jornada dramática en la que más de un centenar de magrebís su jugaron la vida para llegar a España. Dos de ellos lo hicieron al estilo de los balseros cubanos, navegando sobre sendos neumáticos de camión.

La muerte de los cuatro subsaharianos se produjo poco después de las siete de la tarde en la playa de Los Pajaritos, en la costa del municipio de Tuineje.

En el incidente de ayer, el resto de ocupantes de la embarcación, 34, pudieron ser rescatados ayudados por bañistas y efectivos de la policía local, la Guardia Civil y la Cruz Roja, que utilizaron todas las embarcaciones, incluso de pescadores, para sacar a los inmigrantes del agua.

A pesar del alto riesgo, el ansia por alcanzar las costas provoca que los inmigrantes opten por métodos cada vez más precarios. Es el caso de los dos magrebís detenidos en Tarifa (Cádiz) cuando trataban de llegar a tierra, fatigados por el trayecto de 14 kilómetros, a bordo de sendos neumáticos y ayudados con aletas.

Mientras unos pocos se arriesgan y deciden cruzar por zonas vigiladas por el Servicio Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) en Cádiz, son más los que optan por tomar tierra en provincias menos controladas por el momento, como Granada o Almería. Así, durante la mañana de ayer fueron interceptados más de un centenar de inmigrantes, entre los que se encontraban un menor.

CADAVER EN GRANADA A las 23.30 horas del viernes, Salvamento Marítimo localizó una embarcación que buscaban desde media tarde del viernes por la zona de la Punta Sabinar, a bordo de la cual iban otros 64 inmigrantes. Por último, en las playas de La Rápita (Granada) fue localizada otra patera con 20 marroquís que tras recibir atención médica fueron trasladados a Motril para su repatriación.

Junto a estas embarcaciones, la Guardia Civil de Motril localizó a primera hora de la mañana el cadáver de un joven con rasgos magrebís en un acantilado cercano a la playa de Rijana. El joven podría llevar muerto unos cinco días. En Cádiz apareció el cadáver de otro joven marroquí, este de 25 años.