Una mujer, de 36 años, y un niña, de 10, han muerto hoy atropelladas por un autobús de línea en el barrio del Carmel de Barcelona, en un accidente que ha dejado también 11 heridos leves y que, al parecer, ha ocurrido tras un discusión de tráfico entre el chófer y un transportista.El accidente ha sucedido a las 11.50 en la confluencia entre las calles Dante Alighieri y Pantà de Tremp de Barcelona cuando el conductor del autobús ha perdido el control del vehículo y se ha subido a la acera, donde ha atropellado mortalmente a dos personas y ha acabado colisionando con un edificio.A consecuencia del atropello, han muerto una mujer de 36 años y una niña de 10, mientras que han resultado heridos leves el conductor del autobús y otras diez personas, en su mayoría pasajeros del vehículo siniestrado.Cuatro de los heridos permanecen ingresados en los hospitales Vall d'Hebron y Sant Pau de Barcelona, donde se recuperan de contusiones y fracturas de carácter leve que evolucionan favorablemente.Aunque las primeras cifras señalaban que eran nueve los heridos en el siniestro, el balance final es de once, ya que incluye a las personas que, tras el atropello, han acudido por su propio pie a centros hospitalarios para ser atendidos de crisis nerviosas o lesiones muy leves.Un bebé de casi dos mesesEntre esos heridos figura un bebé de mes y medio que viajaba en el autobús y que ha sido dado de alta del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, después de que las radiografías que se le han practicado descartaran que sufra alguna lesión de relevancia.Tras el siniestro, la Guardia Urbana ha practicado la prueba de alcoholemia al conductor, que ha resultado negativa, y ha precintado el autobús a la espera de que sea inspeccionado por los responsables de la investigación.Una discusión de tráficoAunque todavía se desconocen las causas del atropello, testigos presenciales del mismo han referido una discusión de tráfico que mantuvieron justo antes del siniestro el conductor del autobús y un transportista cuya furgoneta estaba mal aparcada e impedía el paso del coche de línea.Según el relato de los testigos, el conductor del autobús ha estado haciendo sonar el claxon durante unos diez minutos hasta que ha aparecido el transportista de la furgoneta, con el que se ha enzarzado en una fuerte discusión, y después ha regresado al volante muy nervioso, por lo que no se ha percatado de que tenía giradas las ruedas.Chófer expertoUn portavoz de la compañía Authosa, a la que pertenecía el autobús, ha explicado que el conductor, que se encuentra en estado de shock, recuerda sólo haber estado detenido durante diez minutos esperando que la furgoneta se moviera, pero no ha mencionado discusión alguna.El chófer, según el mismo portavoz, llevaba 17 años en la compañía y tenía una larga experiencia como conductor de autobús y en la ruta 87, que había recorrido infinidad de veces.Asimismo, el vehículo, que pese a pertenecer a una compañía privada realizaba una línea de transporte urbano integrada en la Entidad Metropolitana de Transporte (EMT), tenía cinco años de antigüedad y había superado las revisiones correspondientes.