Tiffani Adams viajaba en avión de Quebec a Toronto, un trayecto en Canadá que apenas dura hora y media pero que se ha convertido en la peor pesadilla para ella.

"Me quedé dormida a mitad de mi corto viaje de hora y media", publicó en la página de Facebook de Air Canadá. "Me desperté a media noche congelada, en mi sitio y en completa oscuridad", explica, en la que narra que fue una experiencia que parecía una pesadilla.

Cuando se vio en esa situación, trató de llamar a un amigo, pero el móvil no tenía batería y se apagó. Trató de cargarlo, pero no todo en la aeronave estaba apagado. "Como alguien que sufre ansiedad, os puedo decir lo aterrador que fue esto".

Después de un momento crítico, consiguió abrir una puerta del avión, pero se vio a sí misma a varios metros de altura sin poder salir de él.

Trató de pedir auxilio desde allí, incluso a los trabajadores de los carros de equipaje, hasta que un empleado se quedó en shock al verla. "Preguntó cómo podía ser que me hubieran dejado en el avión. Me pregunto lo mismo", dice indignada.

Air Canada está revisando el incidente e investigando por qué los empleados de ese vuelo no se percataron de la situación.