Cientos de personas han asistido este sábado al funeral de la joven de 17 años Anene Booysen que fue brutalmente violada en la localidad de Bredasdorp, situada en el sur del país, a unos 130 kilómetros al este de Ciudad del Cabo. La adolescente regresaba a su casa tras asistir a una fiesta en un bar cercano la semana pasada cuando fue violada por al menos tres personas y abierta en canal, desde el estómago a los genitales. La joven fue encontrada por los guardias de seguridad de un solar en construcción y llevada a un hospital donde falleció.
Cientos de personas, incluida la ministra de Mujeres, Juventud, Niños y Personas con Discapacidad, Lulu Xingwana, y el ministro de Seguridad de la provincia del Cabo Occidental, Dan Plato, han abarrotado la iglesia de la localidad de Bredasdorp, donde se ha instalado una carpa para acoger a aquellas personas que no cabían en el recinto religioso.
Antes de morir, la joven logró identificar a uno de sus agresores. Tres hombres han sido arrestados en relación con esta violación y se espera que comparezcan ante el tribunal el martes. El hermano de la joven, Ryno Booysen, ha señalado a los medios del país que conocía a uno de los sospechosos. "Era un amigo mío, fuimos al colegio juntos, nos alojábamos en la misma casa, éramos como hermanos", ha declarado.
Según la emisora estatal SABC, Xingwana ha expresado que los hombres jóvenes necesitan modelos que les enseñen que abusar de las mujeres está mal. Durante el sepelio, el ministro de Seguridad de la provincia del Cabo Occidental ha señalado que los hombres tienen la responsabilidad de poner fin a los abusos contra las mujeres y las niñas en el país.
El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, ha expresado su consternación e indignación y ha solicitado que las sentencias sean lo más duras posible con los culpables y una campaña concertada "para acabar con esta lacra de nuestra sociedad".
Sudáfrica tiene el número más elevado de violaciones denunciadas por habitante de todos los países miembro de la Interpol, con más de 64.500 casos denunciados durante los años 2011 y 2012. Incluso cuando los responsables de las agresiones son arrestados, sólo en el 12 por ciento de los casos acaban en condena y los delitos sexuales rara vez causan la indignación de la opinión pública.
La Liga de las Mujeres del Congreso Nacional Africano está intentado movilizar a la población de la misma forma que en India se organizaron manifestaciones tras la violación y asesinato de la joven india estudiante de fisioterapia Jyoti Singh Pandey.
