Una mujer de 40 años en tratamiento psiquiátrico atiborró ayer de tranquilizantes a sus cuatro hijos, logró acabar con la vida de dos ellos e intentó suicidarse sin éxito. El escalofriante suceso tuvo lugar en la localidad navarra de Mutilva Alta y evoca al guión del filme Los otros, de Alejandro Amenábar. La presunta parricida se halla en trámites de divorcio de su marido, un conocido promotor inmobiliario de Pamplona.

Los servicios de urgencia SOS Navarra recibieron sobre las 9.30 de la mañana una llamada de un familiar en la que alertaba de que algo estaba ocurriendo en el domicilio familiar. Los agentes de la policía foral se desplazaron rápidamente a la vivienda, donde encontraron a dos niños de 3 y 8 años muertos, a otros dos de 12 y 14 años aturdidos, pero aún con vida, y a la madre intentando suicidarse en el garaje de la casa. La mujer se hallaba tumbada en una hamaca inhalando el monóxido de carbono que salía del tubo de escape de su coche.

Los dos hermanos mayores fueron ingresados en el hospital con heridas superficiales de arma blanca en el cuello y una importante intoxicación causada por benzodiacepina, un psicotropo tranquilizante y relajante muscular. No obstante, su pronóstico era leve, salvo complicaciones. La mujer, cuyo primer examen médico realizado en la propia vivienda reflejaba un estado neurológico estable, tenía heridas superficiales que se había causado ella misma al intentar suicidarse. En cuanto al padre, tuvo que recibir asistencia psicológica en el hospital cuando fue a ver sus hijos.

SEPARACION AMISTOSA La presunta parricida está separada y había acordado con su marido quedarse con la custodia de los niños y dejarle que los visitara con relativa frecuencia. El juzgado había señalado para el 14 de marzo el juicio de divorcio, en el debían confirmar lo pactado.

Una vecina que solía coincidir en un parque con la madre y los hijos aseguró que desde hacía unos meses "estaba desaparecida". "Es normal, habladora, con un carácter fuerte y con los hijos muy bien educados", dijo la vecina, quien subrayó la "sorpresa" que había supuesto la noticia "en un pueblo pequeño" donde se conoce todo el mundo.

La titular del juzgado de Aoiz decretó el secreto del sumario y el Ayuntamiento del pueblo vecino, Valle de Aranguren, expresó su solidaridad con la familia.