Conocido por sus corrosivos retratos de la sociedad contemporánea, el cineasta y dramaturgo estadounidense Neil LaBute (Detroit, 1963) ha osado en su nueva película revisar un título de culto de los años 70. Se trata de The wicker man (1973), un extraño y turbador thriller británico que el director descubrió cuando era un adolescente y del que habla como el mayor de los fans: "Es muy extraña y no se parece a ninguna otra película que haya visto. Tal vez no sea perfecta, pero me encanta su historia, su tono y su desenlace" El resultado de su atrevimiento, bautizado con el mismo título que el original, pudo verse ayer fuera de concurso D.D. F.