La niña nicaragüense de nueve años que quedó embarazada en una violación abortó en una clínica privada de Managua y su estado de salud es bueno, informaron fuentes de la Red de Mujeres contra la violencia.

Líderes de esta organización no gubernamental precisaron en rueda de prensa que a la niña se le practicó el aborto anoche y que su estado es satisfactorio.

El abogado de los padres de la niña, Sergio García, informó en la misma rueda de prensa que los progenitores de la menor decidieron que su hija fuera sometida al aborto terapéutico.

Agregó que la intervención fue practicada por tres médicos, que no identificó, que contaron con el "pleno consentimiento" de los padres.

Los progenitores añadieron que el aborto de la niña lo decidieron asumiendo la responsabilidad emanada de la patria potestad y reiteraron que el estado de salud de la menor es excelente y que se encuentra tranquila.

La menor, que llevaba unas 15 semanas de gestación tras haber sido violada en Costa Rica, ingresó anoche de urgencia en una clínica privada de Managua con problemas de salud derivados de su embarazo.

La niña, cuya identidad permanece en reserva como ordena la ley, fue violada presuntamente por un joven costarricense, cuando ayudaba a recolectar café a sus padres, campesinos analfabetos pobres.