Un niño de cuatro años vivió solo una semana junto al cuerpo muerto de su madre en un apartamento de un barrio noble de Viena, informó hoy la televisión pública austríaca ORF. Fuentes de la Dirección de la Policía Federal confirmaron hoy este suceso ocurrido el pasado mes. Según la investigación del caso, la madre del niño, de 33 años, murió aparentemente por una sobredosis de droga sin que nadie se diera cuenta.

Su hijo, de 4 años, se quedó sólo en el apartamento, situado en el barrio Döbling, uno de los más nobles de la capital austríaca, pasando casi todo el tiempo en la cama, junto al cuerpo muerto de su madre, mirando televisión y alimentándose con caramelos y helados. Sólo una semana después pidió socorro gritando a través de una ventana "Ayuda, mi madre no se mueve más".

Así fue alarmada finalmente la policía, que cuando entró en la vivienda encontró el cadáver de la mujer y ordenó una autopsia. Las autoridades buscan familiares del niño, ya que su padre también falleció recientemente y su abuela no está en condiciones de hacerse cargo del pequeño.