Sin duda alguna, una boda es un momento único, mágico e irrepetible que no solo se queda grabado en la memoria de los novios sino en la de todos los asistentes. Al fin y al cabo, una boda es un motivo de celebración y de alegría; es una celebración que es sinónimo de futuro, de amor y del inicio de una familia. Una familia que comienza con un “Sí, quiero” que refleja mucho más que una historia que no ha hecho más que empezar y que todos recordaremos en adelante.

Sin embargo, y a pesar de que los recuerdos que podamos tener en nuestra mente son importantes, tener esas mismas imágenes plasmadas en una foto, no tiene precio. De hecho, una fotografía es una de las mejores maneras de revivir un hecho de nuestras vidas, de recordar todo lo que supuso para nosotros en ese momento y de volver a sentir la alegría, la emoción o la pasión que tuvimos en ese instante.

No obstante, no todas las fotos consiguen eso, sobre todo cuando esas fotos se han hecho sin ningún tipo de cuidado, sin atender a todos esos detalles que hay en el ambiente, que no se ven pero que se sienten y que sin duda se pueden plasmar en una fotografía. Una serie de detalles que en una boda son incluso más importantes que lo que podemos ver y que sería una verdadera pena perder por no contar con un buen fotógrafo profesional.

Por ese motivo, no nos debería de extrañar que cada vez sean más las personas que no dudan ni un segundo en contratar a fotógrafos de boda en Valencia como una parte más de la organización y del presupuesto que se tiene que destinar a una celebración como esta. Como una parte fundamental de la misma. Es más, contar con un buen fotógrafo profesional especializado en bodas no solo será sinónimo de conseguir unas fotografías que consigan avivar todos los recuerdos del evento en cualquier momento posterior sino que será sinónimo de conseguir unas fotografías diferentes, detallistas, de calidad y donde la espontaneidad sea la característica que aparezca en todas ellas.

De hecho, esta espontaneidad es un aspecto muy importante de este tipo de fotografías y que cada vez más parejas les gusta encontrar en las fotos de sus bodas. Al fin y al cabo, atrás se han quedado ya las modas donde los novios posaban en lugares emblemáticos, en todo tipo de parques y jardines elegidos previamente con poses artificiales que se adoptaban justo antes de hacer la foto. Por el contrario, las fotografías espontáneas, artísticas y originales es lo que se busca ahora, es lo que se lleva en este momento como una forma de conseguir un resultado mucho más acogedor, mucho más real y mucho más humano.

En ese sentido, el conocido como fotoperiodismo de bodas precisamente busca eso, conseguir unas fotografías donde no solo se plasme el evento en sí sino donde se quede reflejado el espíritu de todos los asistentes así como los sentimientos que se han respirado en el ambiente durante toda la celebración. Consiguiendo de esta manera unas fotos íntimas que serán el claro reflejo de la historia de amor que se ha sellado en la boda pero que sin duda cuenta con muchos capítulos anteriores. Unos capítulos que también se verán en las fotos de la boda dado que sin duda alguna tanto los novios como todos los presentes recordarán todos esos días que han pasado juntos y que han contribuido a su historia de amor actual.

El fotoperiodismo de bodas: técnica, profesionalidad, espontaneidad y amor

Por lo tanto, un reportaje de bodas no será una serie de fotografías sin más sino que será un reflejo de los novios y de su historia, al igual que lo será su boda. Y un fotógrafo especializado en bodas no será un profesional más sino que sabrá conectar con la pareja, sabrá ver más allá de lo que dicen las palabras y sabrá involucrarse con todo el evento. Pero, sobre todo, será capaz de involucrarse con los novios para conocerles mejor y saber más acerca de su relación para que todos esos sentimientos se puedan reflejar en las fotografías.

Como podemos ver, una boda no es un evento cuya organización haya que tomarse a la ligera sino que todos los aspectos de la misma serán de especial importancia si queremos que sea un verdadero éxito. Sobre todo las fotografías, una parte que a menudo dejamos en un segundo plano y que pensamos que no son tan importantes como lo pueden ser el banquete, los vestidos o la lista de invitados pero que sin duda será el mejor recuerdo que todos los asistentes puedan tener.