Familias atrapadas en sus coches por la gran nevada en la AP-6 pasaron la noche en sus coches a la espera de que las máquinas quitanieve pudieran desbloquear las vías, en las que permanecían atascados desde la tarde del sábado.

El ciudadano gallego José Rúas, uno de los afectados, relataba que tuvo que pasar la noche en su vehículo en El Espinar junto a su mujer y sus dos hijos, a las altura del kilómetro 62 de la AP-6, en sentido Galicia.

Lo mismo le sucedió a muchos otros viajeros que estaban ocupando los tres carriles de la derecha de la vía. El cuarto estaba lleno de nieve.

José Rúas se encontró con problemas de circulación en la tarde del sábado, a partir de las ocho, cuando salió del túnel de Guadarrama. «Hasta el túnel la circulación era lenta, en tercera, cuarta marcha», cuenta. Pero a la salida del túnel, cada hora lograron circular 500 metros. «A las ocho de la tarde nos habíamos movido un kilómetro, y desde la diez ya no nos movimos», recuerda este padre de familia.

Para pasar la noche se arreglaron «más o menos», echando mano de ropa del maletero.

Desde su vehículo, Rúas vio a efectivos de la UME y de la Guardia Civil examinando la zona, pero no lograban arreglar la situación las máquinas quitanieve. «Intentaron pasar varias, pero no tenían hueco y quedaron atrapadas».

En sentido a Madrid sí había circulación a pesar de la nevada copiosa. «Aunque pasaban despacito».

Quejas

Rúas explica que varios conductores se quejaron porque habían pedido que se abrieran las medianeras para emprender el regreso a Madrid y no se les había autorizado.

Efectivos de la Unidad Militar de Emergencias trabajaban a destajo esa noche en Castilla y León y en Madrid para liberar a los vehículos atrapados desde la tarde del sábado en varios tramos de esa AP-6, como fue el caso de este ciudadano gallego.

Cincuenta profesionales de la UME estuvieron entre los kilómetros 62 y 67 de esta carretera, a la altura de Los Ángeles de San Rafael, en ambos sentidos, mientras que otros 113 colaboraban en el rescate de vehículos en el kilómetro 95, en dirección Madrid.

La Delegación del Gobierno en Castilla y León solicitó también la participación de la UME para afrontar los efectos del temporal de nieve en la provincia de Segovia.

Pidió su participación para «el auxilio a personas en vehículos parados e inmovilizados», así como «en apoyo a la concesionaria Iberpistas en las labores de despejado de la vía», tal y como explicaron.

La vía que une Madrid con Galicia pasando por Castilla y León fue la que sufrió los mayores inconvenientes ante las inclemencias meteorológicas. Allí se vivieron los momentos más dantescos de la jornada con familias con niños atrapados hasta 18 horas en sus vehículos.

Como fue el caso de Rúas, su mujer y sus hijos, que no olvidarán el temporal ni la espera a que llegara la UME y las máquinas quitanieve.