Para evitar los equívocos que ha suscitado el redactado de la nueva ley de seguridad vial, los grupos parlamentarios han introducido un párrafo en el texto que se debate en el Senado para dejar claro que, a la hora de sancionar los excesos de velocidad, se tendrán en cuenta los márgenes de error de los radares, estipulado en torno al 10%.

La confusión se ha suscitado a partir de la tabla de velocidades y sanciones que incorpora la también llamada ley de multas exprés. Algunos medios interpretaron, equivocadamente, que permitía empezar a multar a partir del primer kilómetro de exceso, algo que no estaba en el ánimo ni de la DGT ni de los grupos que apoyan la norma.

El diputado de CiU Jordi Jané explicó ayer que, para acabar con las dudas, el Senado aprobará una enmienda de su grupo --propuesta por el RACC tras recibir cientos de quejas-- que dice que las sanciones se aplicarán manteniendo "los márgenes de error previstos, según los certificados de verificación de los aparatos. Estos, determinados por orden ministerial, oscilan entre un 3% y un 10%.

Los radares seguirán disparándose a partir de 133 kilómetros por hora y de 122 en los tramos cuyo límite es de 110. En limitaciones inferiores, saltarán a partir de 11 km por hora de más.