La Policía Nacional ha desarticulado una organización que introducía cocaína vía aérea para distribuirla finalmente en distintos países de Europa y ha detenido a ocho personas, entre ellos los cabecillas del grupo, ha informado la dirección general del cuerpo.

Según las investigaciones, la red planificaba introducir grandes partidas de cocaína ocultas en contenedores de mercancía legal por vía marítima y, para financiarlo, pretendía transportar previamente cantidades inferiores de estupefaciente mediante "mulas" en vuelos comerciales.

En la fase final de la operación, los agentes interceptaron en el aeropuerto de Barajas a una persona con 5 kilos de cocaína repartidos en ocho paquetes que llevaba pegados a su cuerpo en ropa interior.

La investigación se inició en septiembre del año pasado cuando la Policía detectó la presencia en España de una organización internacional dedicada a introducir cocaína en Europa.

Los agentes identificaron y localizaron a dos de los responsables de esta red: el encargado de coordinar las operaciones de introducción de la droga y el enlace con los proveedores de estupefaciente en Colombia.

Además, se detectaron preparativos para introducir un cargamento de cocaína por vía marítima, en contenedores, oculto entre mercancía legal.

La falta de liquidez retrasó el envío, según constataron los agentes, que comprobaron que los narcos intentaban obtener dinero para financiar esta operación y decidieron introducir cantidades menores de estupefaciente a través de correos humanos.

Estas "mulas" transportarían la droga en vuelos comerciales desde Colombia.

Así, lograron detener en Barajas a una de estas "mulas", a otro pasajero y a otra persona que les esperaba en el aparcamiento, lo que desencadenó el resto de los arrestos hasta un total de ocho.

En la operación se han intervenido varios vehículos de gama alta, multitud de teléfonos móviles, dinero en efectivo, sustancias de corte y documentación relacionada con la investigación.