Un año más, Olivenza será este fin de semana el punto de partida de la temporada taurina española, en cuanto a ferias de relevancia se refiere. Las máximas figuras del escalafón de matadores y los novilleros punteros se verán las caras sábado y domingo en el coso oliventino, que viste sus mejores galas para acoger la cita taurina más importante del año en Extremadura.

Ambiente por todo lo alto, localidades prácticamente agotadas para las dos corridas de toros y buenas previsiones meteorológicas harán que Olivenza sea una fiesta. Esta tarde abren esta miniferia Morante de la Puebla, El Juli y José María Manzanares (hijo), para lidiar una corrida del hierro de Jandilla, ganadería que pasta en campos extremeños, propiedad de Borja Domecq.

En la tarde de ayer se aprobaron en los reconocimientos veterinarios ocho toros que ya esperan en los corrales a que lleguen las cinco de la tarde. Una corrida pareja, bonita de hechuras y con cuajo que debe embestir, si no fallan los cálculos.

Para el domingo, doble sesión. Por la mañana, se celebrará una novillada de cuatro novilleros, dos de la tierra --Javier Solís y Miguel Angel Perera-- y otros tantos salmantinos --Pedro Gutiérrez El Capea y Eduardo Gallo--. Y por la tarde, toros de Juan Pedro Domecq, para Enrique Ponce, Jesulín de Ubrique y Antonio Ferrera. Más de setenta periodistas de prensa escrita, radio y televisión están acreditados para cubrir el evento taurino.