Aunque el número de «casos confirmados» en China del covid-19 (el nuevo coronavirus) se ha «estabilizado» en la última semana, aún es «muy pronto» para predecir el fin de la epidemia. Así lo anunciaron ayer expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), tras dos días de reuniones en Ginebra con 400 expertos de todo el mundo para analizar tratamientos, vacunas y otras medidas contra el virus.

El jefe del departamento de emergencias sanitarias de la OMS, Michael Ryan, dijo que el comportamiento del covid-19 fuera de Hubei ya «no parece tan agresivo o acelerado». Pero el director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, insistió en «extremar la cautela». «Este brote todavía puede ir en cualquier dirección», advirtió Tedros Adhanom, quien calificó el virus de «enemigo común que no respeta fronteras».

La OMS estima que las primeras pruebas para la vacuna contra este nuevo coronavirus comenzarán en cuatro o cinco meses, aunque su uso generalizado no llegará hasta dentro de un año o año y medio. El organismo también ha determinado que algunos de los fármacos que están funcionando mejor en los tratamientos de los pacientes son la combinación de los antirretrovirales Lopinavir y Ritonavir (utilizados habitualmente contra portadores del VIH) y el nuevo antiviral Remdesivir.

«BAJO CONTROL» / «No hay motivos ni de pánico ni de crisis. La situación está bajo control», insisten fuentes diplomáticas europeas en vísperas de la reunión de emergencia sobre el coronavirus que mantendrán hoy en Bruselas los ministros de sanidad de la Unión Europea (UE). Una cita convocada por la presidencia de la UE, que ostenta este semestre Croacia, para evaluar las medidas adoptadas por los Estados miembros, reforzar la coordinación entre los Veintisiete y, sobre todo, lanzar un mensaje de calma a la opinión pública europea. «La idea del Consejo es mostrar que la UE está tomando medidas apropiadas y prepararse para otras medidas que podrían adoptarse en el futuro», repiten estas fuentes sobre el mensaje político que saldrá del Consejo.

DEBATE / El debate, que arrancará a las diez de la mañana y concluirá al filo de la una del mediodía, girará en torno a dos grandes preguntas. La primera: ¿cómo mejorar la cooperación entre los Estados miembros cuando sea necesario adoptar medidas preventivas para proteger la salud pública? Y la segunda: ¿pueden la epidemia y determinados acontecimientos en países terceros afectar el suministro europeo de material médico y medicinas y qué medidas son necesarias para estar preparados?

También ayer lugar una rueda de prensa conjunta del Ministerio de Sanidad y la Conselleria de Salut para lanzar un mensaje conjunto de «calma y tranquilidad» a la ciudadanía. Pese a ello, horas después era anunciada la cancelación del Mobile World Congress (MWC).

«No hay ninguna razón de salud pública que nos aconseje tomar ninguna medida adicional respecto a ningún evento o acontecimiento en Cataluña y España. Si la hubiera, la tomaríamos», defendió el ministro Salvador Illa. «Cataluña y España son zonas de muy bajo riesgo de coronavirus», afirmó la consellera Alba Vergés.

Por su parte, tanto el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes) del ministerio, Fernando Simón, como el secretario de Salut Pública de Cataluña, Joan Guix, mostraron su escepticismo sobre un estudio de hace dos días que apuntaba a que el período de incubación del virus es de 24 días en lugar de 14, como se creía. «La evidencia que aporta este artículo no es suficientemente sólida para cambiar los períodos de incubación actuales», dijeron. La OMS, de hecho, mantiene los 14 días. Guix se reafirmó en que no existe en territorio catalán «ningún problema de salud pública». «Solo existe el riesgo de una epidemia de miedo y de xenofobia», lamentó este experto.

fin a la cuarenta / Informar también que los españoles procedentes de Wuhan, epicentro del brote de coronavirus, que cumple la cuarentena en el Hospital Gómez Ulla de Madrid recibirá el alta médica hoy, confirmaron ayer fuentes de Moncloa. Ninguno ha presentado síntomas en estos 14 días de cuarentena y todos han dado negativo en las pruebas que se les han realizado para descartar un contagio. El grupo, formado por una veintena de personas, llegó a Madrid el 31 de enero en un avión fletado por Reino Unido y procedente de Wuhan; tras aterrizar en la base militar de Torrejón de Ardoz.