La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció ayer la donación por parte de la farmacéutica Roche de 30 millones de cápsulas de un antiviral que permitirá afrontar la primera fase de una eventual pandemia de gripe humana por mutaciones del virus de la gripe aviar. El antiviral oseltamivir, comercializado como Tamiflu, permitirá tratar a tres millones de personas, puesto que la posología es de dos cápsulas diarias durante cinco días.

El oseltamivir es un medicamento eficaz frente a la cepa H5N1 de la llamada gripe del pollo, que es la que más se ha propagado y ha logrado transmitirse a los seres humanos. Desde el trasvase de esta enfermedad a las personas, en 2003, se han contabilizado 112 infectados, de los que 57 fallecieron en cuatro países: Vietnam, Tailandia, Camboya e Indonesia. Los brotes más recientes se han registrado en Rusia, Kazajstán, Mongolia y Japón.

El director de la OMS, Jong-Wook Lee, explicó ayer que el medicamento donado gratuitamente por Roche podría ayudar a reducir la mortalidad causada por esa variante de la gripe del pollo. Explicó que, combinado con otras medidas, permitirá contener la propagación del virus.

ALTO RIESGO Jong-Wook Lee aseguró que no hay país a salvo de esta amenaza sanitaria y que por ello "todos --dijo-- deben estar preparados". Recordó que la epidemia de gripe que asoló Europa en 1918 causó unos 50 millones de muertos y la de 1960 se cobró la vida de cinco millones de personas. La migración de aves en el hemisferio norte en otoño hace temer una expansión del virus hacia los países del sur.