La Guardia Civil ha desarticulado un entramado asentado en Toledo y Madrid que utilizaba personas en situación de exclusión social a las que extorsionaba para obtener créditos financieros en una operación que se ha saldado con once detenidos, entre ellos el cabecilla y sus lugartenientes.

Los arrestados captaban a personas en ambientes marginales como consumidores de sustancias estupefacientes para mediante el engaño obtener créditos en financieras, informa la Guardia Civil.

La operación ha sido llevada a cabo por agentes de este Cuerpo destacados en el Equipo de Policía Judicial de Collado Villalba(Madrid), que han localizando a una decena de víctimas que en la actualidad se encuentran con deudas que en algunos casos superan los 20.000 euros.

TESTIGO CLAVE

La investigación se puso en marcha el pasado mes de enero al presentarse una persona en la Guardia Civil y relatar que desde agosto de 2015 estaba siendo extorsionado por un grupo de personas, quienes le habían prometido un trabajo, pidiéndole a cambio su documento nacional de identidad (DNI) para poder abrirle una cuenta. Su relato hizo sospechar a los agentes de que otras personas en situaciones similares pudieran haber sido víctimas de un grupo que aprovechando la falta de trabajo o la adicción a sustancias estupefacientes por un módico precio obtuvieran créditos de los que se beneficiarían, quedándole a las víctimas la deuda a la que no podían hacer frente. Gracias a los datos aportados por esta víctima se localizó a uno de los integrantes de este grupo que resultó ser el cabecilla de la organización.

Esta persona se movía a sus anchas por los ambientes marginales, dedicándose a seleccionar a sus víctimas, las cuales debían de carecer de antecedentes y no haber solicitado ningún tipo de crédito. Una vez que localizaba a las personas idóneas y a base de falsas promesas se hacía con su DNI, el cual era pasado al siguiente escalón para comenzar a falsificar la documentación necesaria. Otra parte del grupo ya desmantelado se dedicaba a dar de alta en la Seguridad Social y a falsificar su vida laboral, una vez que conseguían toda la documentación, obligaban a las víctimas, generalmente jóvenes, a acudir a las financieras a solicitar los créditos o a comprar productos financiándolos, amenazándoles con hacerles daño si no lo hacían.

Un estudio pormenorizado de los datos aportados por las financieras permitió cerrar el círculo en varias víctimas que reunían todas el mismo patrón y que la mayoría de ellas no podían hacer frente al pago de los créditos obtenidos. Este estudio permitió centrar varios domicilios donde se habían asentado las razones sociales de los acreedores, estando situados en la provincia deToledo, concretamente en Talavera de la Reina, Buenasbodas, Santa Olalla y Mejorada.

Los agentes descubrieron que en esas localidades vivían los integrantes del grupo organizado, por lo que tras lograr su identificación procedieron a su detención. También localizaron a las personas que adquirían los productos financiados a un precio inferior al del mercado, que igualmente fueron detenidas. A los integrantes de esta organización, todos ellos de nacionalidad española, se les imputan los delitos de extorsión, coacciones, amenazas, falsedad documental, receptación y pertenencia a grupo criminal.