Once personas que circulaban en un remolque enganchado a un turismo resultaron heridas de diversa consideración la madrugada del domingo, en el recinto ferial de la localidad pacense de Almendralejo, tras volcar el carro en el que iban cuando el conductor del vehículo realizaba trompos y otras maniobras peligrosas. Los ocupantes del remolque estaban celebrando una despedida de soltero.

El inspector jefe de la Policía Local de este municipio, Antonio Ramírez, ha relatado que los heridos y el conductor, que resultó ileso, acudieron a este lugar en sus vehículos particulares tras haber estado bebiendo y que, voluntariamente, montaron en el remolque, donde "dieron vueltas e hicieron trompos".

A consecuencia de "la conducción temeraria", el carro volcó y algunos de sus ocupantes quedaron "atrapados" mientras los demás "salieron despedidos". Los dos heridos más graves, fueron ingresados en la UCI del hospital Infanta Cristina de Badajoz, uno de los cuales permanece aún en observación y con pronostico reservado, por presentar traumatismo cranoencefálico severo.

El conductor huyó

Estos dos varones, de edades comprendidas entre los 40 y 51, son los "padres de los futuros novios", por lo que que "la boda se va a convertir en pesar", ha apostillado. Los otros heridos fueron atendidos en el hospital Tierra de Barros por lesiones leves, donde se les dió el alta esa misma noche, excepto a uno de ellos que por su gravedad fue trasladado al Hospital de Mérida.

El conductor, J.A.N.H., de 28 años, expuso que "se fue del lugar" del siniestro y que horas después acudió voluntariamente a prestar declaración, momento en el que fue detenido y se instruyeron las diligencias judiciales como presunto autor de dos delitos: uno contra la seguridad vial, por conducción temeraria y estar bajo los efectos del alcohol y otro por omisión del deber de socorro.

Un primo de uno de los heridos, Francisco Manuel Ortega, ha apuntado que su familiar, pese a "recibir el alta ayer", tiene que regresar a Badajoz para que "le reestructuren la cara", ya que necesita cirugía maxilofacial, se ha lamentado.

Un lugar de botellón

El hombre ha afirmado que él estaba junto a muchos jóvenes en ese mismo recinto a la hora del accidente, pues es un lugar "de botellón", por lo que ha subrayado que el suceso todavía podía "haber sido mucho peor", dado que "han podido coger a algunos más, porque se acumula mucha gente" en el ferial, ha concluído.

El juzgado de Instrucción número dos de Almendralejo ha decretado la libertad provisional para el conductor y ha intervenido cautelarmente su permiso de conducción tras lo sucedido. De momento, la boda ha quedado suspendida, según fuentes policiales.