La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un nuevo informe en el que recomienda aumentar en un 20% los impuestos sobre las bebidas azucaradas para reducir su consumo y, por ende, disminuir el riesgo de obesidad, la diabetes tipo 2 y la caries dental. Según el informe, Las políticas fiscales para la dieta y la Prevención de Enfermedades no Transmisibles (ENT), reducir el consumo de estas bebidas provocará una disminución de la ingesta de azúcares libres y calorías, mejorará la nutrición de la población y salvará vidas.

Los azúcares libres son los monosacáridos (tales como la glucosa o fructosa) y los disacáridos (como la sacarosa o azúcar de mesa), los cuales se añaden a los alimentos y bebidas por los fabricantes, cocineros o consumidores. Además, también están presentes de forma natural en la miel, jarabes, jugos de fruta y zumos concentrados de fruta.

Esta recomendación se sustenta en el dato de que en el 2014 el 39% de los mayores de 18 años tenían sobrepeso y de que entre 1980 y 2014 se duplicó la obesidad en los adultos. Además, en el 2015 unos 42 millones de menores de 5 años tenían sobrepeso u obesidad, lo que supone un aumento de 11 millones de niños en los últimos 15 años. De ellos, el 48% vivían en Asia y el 25%, en África.

También han aumentado a nivel mundial los casos de diabetes, de 108 millones en 1980 a 422 millones en el 2014. Una enfermedad que provocó 1,5 millones de muertes en el 2012.

FRUTAS Y VERDURAS MÁS BARATAS / Para mejorar la dieta y prevenir las enfermedades no transmisibles, la OMS aconseja reducir en un 10 o un 30% los precios de las frutas y verduras frescas; aumentar los impuestos en los alimentos con alto contenido en grasas saturadas, trans y sal; e incrementar el precio del tabaco.

El doctor Francesco Branca, jefe del Departamento de Nutrición y Salud en la OMS, reveló que el mayor consumo de ese tipo de bebidas ha pasado de Estados Unidos a Latinoamérica, con Chile y México como los mayores consumidores del mundo, éste último prácticamente al mismo nivel que EEUU. Mientras en Estados Unidos vemos cierta reducción en la ingesta de calorías, en los últimos cinco años observamos el movimiento inverso en Latinoamérica, comentó. A las dietas insanas se atribuyen once millones de muertes al año. H