"Si los políticos no toman las medidas necesarias este verano, un rebrote y un nuevo confinamiento pueden tener consecuencias sociales inasumibles". Así de contundente ha sido este martes Lara Contreras, responsable de investigaciones e incidencia social de Intermón Oxfam durante la presentación del informe 'Una reconstrucción justa y necesaria', que prevé una crisis social tras la pandemia peor que la financiera, si no se adoptan políticas urgentes en favor de los más vulnerables. Para evitar las secuelas de un nuevo encierro, la entidad propone una reforma fiscal que grave a los más ricos, y regularizar a las personas sin papeles para que no entren en la extrema vulnerabilidad.

El confinamiento ya ha conllevado graves consecuencias sociales, con la peor tasa de pobreza de la década, y unas previsiones que, de producirse, podrían aumentar la desigualdad a niveles superiores de la que hubo durante la crisis financiera del 2008, según las estimaciones planteadas por Oxfam Intermon. Sin embargo, un nuevo encierro puede alberga consecuencias inciertas a la par que devastadoras, según augura la entidad. "Esperemos que los pactos de la reconstrucción permitan salir de esta crisis protegiendo los derechos de los trabajadores y blindando al sector público", ha añadido Contreras.

Una de las medidas clave que habría que tomarse este verano, según Oxfam, es la de la facilitar los permisos de residencia y de trabajo a las personas inmigrantes que no tienen papeles, especialmente aquellas personas que les han denegado el derecho de asilo, o los inmigrantes que tienen hijos a cargo. "No pueden acceder al Ingreso Mínimo Vital (IMV), a ninguna ayuda de desempleo... están fuera de todo el sistema de protección social", ha alertado Carreras. Además, hay inmigrantes que ya tenían estos permisos pero que pueden perderlos si se han quedado sin empleo en este momento. Y es que los migrantes tienen más del doble de posibilidades de perder su empleo que los españoles, según los datos de la entidad.

REFORMA FISCAL

Otra propuesta que deberían contemplar los pactos de la reconstrucción es una reforma fiscal donde los ricos, especialmente aquellos que han ganado dinero durante la pandemia, paguen más impuestos. "Con este dinero hay que reforzar los sercios públicos, y especialmente los cuidados: tenemos cientos de mujeres en España cuidando de personas mayores, haciendo un trabajo esencial, y a veces trabajan en autenticas condiciones de esclavismo", ha alertado la ONG. Además, piden acabar con la precariedad laboral, los falsos autónomos, creando un mercado de trabajo con salarios dignos y estables.