Conscientes de que su imagen tiende al deterioro desde que fueran declarados, hace una semana, sospechosos formales y para reforzar el anuncio de que no destinarán los fondos solidarios recaudados para costear su defensa, los padres de Madeleine McCann han decidido retomar, vía costosa campaña publicitaria, el mensaje de que buscan y seguirán buscando a su hija.

La pareja empleará 120.000 euros procedentes de los donativos en una campaña que incluirá la difusión de carteles con la foto de Madeleine por toda Europa y la colocación de publicidad en vallas y periódicos de España y Portugal, así como anuncios en televisión.

La iniciativa fue anunciada ayer por John McCann, tío de Madeleine, y coincide con las consultas realizadas por la pareja con Phill Hall, antiguo director del diario sensacionalista News of the World, actualmente responsable de una importante empresa de relaciones públicas.

"SIGUE DESAPARECIDA" "El principal objetivo del Fondo Madeleine es intentar que ninguna pista en su búsqueda sea ignorada", señaló McCann durante una conferencia de prensa celebrada en Rothley, localidad en la que reside la familia, explicando que con la campaña publicitaria se "tratará de recordar que Madeleine sigue aún desaparecida".

Los McCann viajaron el viernes a Londres para reunirse con el equipo de expertos en comunicación y con sus abogados, liderados por Michael Caplan, el prestigioso letrado que evitó la extradición a España de Augusto Pinochet.

Una portavoz de la familia aseguró también que Gerry y Kate no tienen previsto volver por ahora Portugal, salvo que la justicia portuguesa así se lo pida.

El diario británico The Times especulaba ayer con la posibilidad de que agentes de la policía lusa se desplacen a Inglaterra para entrevistarse con los sospechosos. Los McCann deberán conocer la próxima semana la decisión del juez que está estudiando el informe sobre el caso.

El magistrado portugués encargado del caso puede imponer severas restricciones de movimiento al matrimonio, o puede incluso inculparles, algo improbable de momento.

EL PELUCHE DE COLOR ROSA Según sus allegados, los investigadores no han reclamado nuevos objetos, como el peluche de color rosa, la mascota de Madeleine, que la madre ahora siempre lleva consigo o el ordenador portátil del padre.

"Lo que están haciendo es evaluar la situación y preparar su caso legal", señaló la portavoz. "Pedimos calma a los medios de comunicación.

"Las próximas semanas serán más tranquilas. Necesitan tiempo para preparar su caso y para estar con los dos gemelos", añadió, reconociendo que la presión sobre la familia es muy intensa.

La casa de los McCann permanece desde hace una semana, cuando se produjo su retorno de Portugal, asediada por cámaras de televisión y periodistas de todo el mundo.

La portavoz indicó que el matrimonio recibe cada día un millar de correos electrónicos, así como cientos de cartas, postales, tarjetas y flores.