EL TRIBUNAL SUPERIOR de Justicia de Cataluña ha dado la razón a los padres de una niña, nacida en el 2003 en el Hospital Vall d´hebron, que sufre una parálisis en el brazo por unas complicaciones durante el alumbramiento. Estos problemas se habrían evitado si se hubiera practicado una cesárea, dado que el bebé pegó 4,7 kilos.