Una gran incógnita planea sobre el universo rosa: ¿quién ha perdido más los papeles, Isabel Pantoja o Sara Montiel? La primera se pasea por Marbella como si la alcaldesa de la localidad malagueña fuera ella, y la segunda no sólo ha utilizado a un cubano inocentón al que ha convertido en marido de quita y pon, sino que usa a sus hijos para seguir rizando el rizo de su patético delirio.

La vocación de las dos artistas es, desde luego, el espectáculo. La épica las pierde. "El amor mueve montañas", dijo Pantoja cual Escarlata O´Hara, cuando, por fin, apareció en un acto oficial en Marbella con Julián Muñoz de una mano y el paquete de tabaco en la otra (en la fotografía, el pasado jueves). Sara Montiel ha apostado por la tragedia: "Mis hijos me han dado la felicidad como madre, pero me han hecho una desgraciada como mujer".

La separación de Sara y Tony Hernández es tan absurda como su boda, pero no tanto como el empeño de Pantoja en adosarse a Julián Muñoz, ejerciendo además de primera dama marbellí.

HIMNO EN MARBELLA

El pasado jueves, en Marbella, la cantante llegó incluso a cortar la cinta inaugural en un acto oficial a los sones del himno nacional. Menos mal que no le dio por cantar --adaptando la letra franquista al trascendente momento-- aquello de "viva España, alzad los brazos, hijos del pueblo marbellí que vuelve a resurgir. Gloria al alcalde que supo seguir, sobre la cruz del mar, el caminar del sol...".

Isabel Pantoja, que durante los últimos 20 años había conseguido separar su personaje de su vida privada, ha optado ahora por cargarse su imagen pública. A la cantante, según personas de su entorno, le importa todo un pimiento, enloquecida como está por una pasión que tiene que ver más con el poder que con el querer.

El caso de Sara Montiel es más desgraciado. La artista se ha separado, pero no se lo ha dicho a su marido. Tony Hernández se encuentra en Cuba, ejerciendo su trabajo en la escuela de cine de San Antonio de los Baños, y cree que Sara lo ha hecho todo para recuperar a sus hijos. "No sé por qué hace esas cosas sin contar conmigo", se lamentó el jueves pasado al ser avisado por teléfono de la exclusiva que Sara había concedido a ¡Hola!. "Yo no sé nada, hablo con Sara todos los días y no me ha dicho que nos hemos separado", afirmó.