El papa Juan Pablo II ha llegado a Madrid poco después del mediodía para iniciar la que será su quinta visita a España, de dos días de duración, en los que se reunirá con decenas de miles de jóvenes y proclamará cinco nuevos santos españoles. Los reyes de España han recibido al Pontífice en la misma escalerilla del avión.

En su alocución, el Papa ha hecho un llamamiento a la paz en España y en el mundo, y ha abogado por la convivencia de los españoles dentro de "la unidad". "Imploro del señor para España y para el mundo una paz que sea fecunda, estable y duradera, así como una convivencia en la unidad, dentro de la maravillosa y variada diversidad de sus pueblos y ciudades", ha dicho Juan Pablo II.

Condena del terrorismo

En el discurso de bienvenida, el Rey ha agradecido las "reiteradas condenas" que el Pontífice ha hecho del terrorismo que sufre España. El terrorismo --"que los españoles padecemos muy en particular", ha dicho-- "es intrínsecamente perverso y nunca justificable".

"Nos confortan siempre vuestras palabras de repulsa al terrorismo y vuestro aliento y solidaridad hacia las personas que sufren el dolor que genera".

El Papa ha viajado en un Airbus A321 de la compañía Alitalia, que ha despegado del aeropuerto romano de Fiumicino a las 09.45 horas y que ha aterrizado en el de Madrid sobre las 12.00 horas, tras haber recorrido los 1.362 kilómetros que separan ambas ciudades.

Juan Pablo II regresará a Roma a primeras horas de la noche del domingo, y desde el aeropuerto de Ciampino se trasladará en un helicóptero al Vaticano. Este es el 99 viaje del Papa fuera de Italia, en sus casi 25 años de pontificado.