Una pareja y sus dos hijos de corta edad han fallecido hoy en una explosión de gas ocurrida a primeras horas de la mañana en una vivienda en el centro de Logroño. Los fallecidos son Roberto Edgardo Videla, argentino de 39 años; su mujer Marta Liliana Saa Lazo, chilena también de 39 años, y sus hijos Exequiel Andrés, de 9 años, y Katherine Alexandra, de 8, informó el Ayuntamiento de la capital riojana. Otras nueve personas sufrieron heridas en el siniestro.

La más grave, la madre del hombre fallecido, una mujer de 81 años, llamada Rafaela María Greco que fue trasladada al Hospital San Pedro de Logroño con quemaduras en el diez o doce por ciento de su cuerpo de pronóstico grave, según la misma fuente. De los otros ocho heridos, otra mujer fue trasladada al mismo centro sanitario con una crisis de ansiedad, y las otras siete fueron atendidas en el lugar de los hechos, donde se instaló un hospital móvil. La explosión ocurrió a las siete de la mañana en una de las ultimas plantas -no se ha determinado aun cual de ellas- del número 25 de la Gran Vía de la capital riojana, uno de los pocos inmuebles antiguos que quedan en esta moderna calle.

La explosión de gas -no se ha determinado aún si de gas ciudad o de butano- fue de gran violencia y pudo oirse en gran parte de la capital logroñesa. En esos momentos se encontraban en el edificio 26 vecinos, de los que trece -dos adultos y un menor- serán realojados esta noche en pisos municipales por el Servicio de Urgencias de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Logroño. La fachada de las dos últimas plantas del edificio saltó por los aires, llenó de cascotes y cristales la calzada y alcanzó la acera de enfrente, en una de la calles más anchas de la ciudad.

La Policía Local acordonó casi inmediatamente la zona y cortó el tráfico de la Gran Vía; minutos después llegaron los bomberos y comenzaron a trabajar en la extinción del incendio posterior a la explosión, que levantó una gran columna de humo. El edificio fue inmediatamente desalojado y rescatados los heridos; la más grave, Rafaela María Greco, alertaba a gritos de que sus familiares seguían dentro de la vivienda, el tercero izquierda del inmueble. A lo largo de la mañana ha ido tomando cuerpo la certeza de que había cuatro familiares de esta mujer sepultados por los escombros en una habitación a la cual los bomberos no podían acceder porque tenían cerrado el paso por los cascotes.

Sobre las 15:00 horas los bomberos han localizado uno de los cadáveres y poco después el alcalde de Logroño, Tomás Santos, presente en el lugar de los hechos, ha confirmado la muerte de la pareja y sus dos hijos. Santos, que ha informado también de que el inmueble ha sufrido graves daños en su estructura y deberá ser demolido, ha estado presente en el lugar del siniestro desde primera hora de la mañana, así como el concejal de Seguridad, Atilano de la Fuente.

También se han acercado hasta el inmueble de la Gran Vía el consejero de Administraciones Públicas y Política Local, Conrado Escobar, y otros miembros del Ejecutivo riojano. El Ayuntamiento de Logroño ha realojado a trece vecinos del inmueble siniestrado, ha trasladado sus dolor a familiares y amigos de los fallecidos ha declarado tres días de luto y las banderas del edificio consistorial ondea a media asta. El Gobierno de La Rioja ha expresado en una nota su más "profundo pesar" por el fallecimiento de esta familia suramericana y ha apuntado que su presidente, Pedro Sanz, ha estado en todo momento informado de los pormenores del siniestro.