Roberto Maqueda y Haewon Oh, dos jóvenes músicos de Badajoz, están a punto de vivir su sueño iberoamericano: participar en un concierto de la Orquesta Joven Iberoamericana que se celebrará este mes en Uruguay, concretamente en la ciudad de Montevideo. El como percusionista y ella con su fagot.

Estos dos integrantes de la Orquesta Joven de Extremadura tuvieron conocimiento por internet de la convocatoria de las Juventudes Musicales de Uruguay para seleccionar instrumentistas para la Orquesta Joven Iberoamericana y decidieron presentarse. "Nos enteramos tarde, pero pudimos mandar los 15 minutos de audio grabado que pedían. Cual fue nuestra sorpresa cuando a la una de la madrugada de ayer nos comunicaron que habíamos sido seleccionados", explica Roberto Maqueda.

Un jurado presidido por la directora de orquesta brasileña Ligia Amadio consideró que estos músicos, formados en el Conservatorio de Badajoz y que ahora cursan sus estudios de grado superior en otros conservatorios españoles, podían participar en el encuentro de jóvenes músicos de Iberoamérica que tendrá lugar del 15 al 22 de septiembre.

El colofón a este encuentro será el concierto interpretado por todos los jóvenes seleccionados de todos los países de iberoamérica.

Sin embargo, tras la emoción y la ilusión iniciales por el acontecimiento, advirtieron un pequeño detalle, que para Roberto y Haewon no es tan pequeño. Los gastos de hospedaje y manutención están cubiertos por la organización, pero no el desplazamiento hasta Montevideo, que les cuesta 1.200 euros a cada uno. Un pasaje demasiado caro para dos estudiantes de percusión y fagot que ha puesto en peligro la aventura iberoamericana.

"Si no encontramos algún apoyo económico no podremos ir, porque es demasiado dinero para nosotros", según este músico, becado por la Orquesta de Extremadura desde enero del 2010.

"Es la primera vez que se celebra un encuentro de este tipo en un país de Latinoamérica y la segunda vez que se convoca a esta gran orquesta, la primera fue en el 2009 en Lisboa coincidiendo con la cumbre de jefes de estado de Iberoamérica", recuerdan.

Por eso, consideran que es una "oportunidad única" para ellos, que peligra por una cuestión meramente económica. "No tendremos otra oportunidad como esta, seríamos de los pocos españoles que representaríamos a nuestro país en un encuentro de este tipo", señala Roberto.

Los dos jóvenes han empezado a movilizarse para canseguir fondos para su viaje. De momento se han puesto en contacto, a través de e-mail, con la consejera de Cultura para exponer su caso y también han hecho un llamamiento a empresas y organizaciones que deseen apoyarles en su peripecia trasatlántica.