La pasajera del Boeing 747 de Iberia que resultó herida durante una turbulencia que afectó a un vuelo entre Buenos Aires y Madrid, que tuvo que ser desviado a Gran Canaria, sufre una hemiplejia que le afecta a toda la zona izquierda de su cuerpo como consecuencia del golpe que sufrió tras salir disparada hacia el techo.

La pasajera accidentada es la británica Elizabeth D, de 59 años, que se encontraba caminando por el pasillo del boing 747 y Madrid y resultó proyectada hacia el techo de la nave por las turbulencias.

Dos médicos que se encontraban a bordo le prestaron los primeros auxilios, pero dada la gravedad de las lesiones, el comandante del avión contactó con los servicios de emergencias de Canarias y tomó tierra en el aeropuerto de Gran Canaria, donde los equipos médicos del Servicio Canario de Urgencias esperaban a pie de pista.

La médico Nuria Jato explicó a Efe que la paciente se encuentra en estado estable, consciente y orientada, pero que la mitad izquierda de su cuerpo está paralizada.

Las pruebas radiológicas realizadas hasta el momento no desvelan traumatismos o fracturas craneales.