El modisto Manuel Pertegaz ha añadido una cuenta más a su collar de reconocimientos. El autor del vestido de novia de Letizia Ortiz sumó ayer su nombre a la lista de maestros que cuentan con la Aguja de Oro, olimpo en el que figuran Oscar de la Renta, Jean-Paul Gaultier y Christian Lacroix. Al recibir el broche, Pertegaz declaró: "Me siento más que reconocido, no quepo en casa con tantos premios".

El mismo galardón fue a parar al italiano Valentino, en un acto tan trastabillado como el pelo de Nati Abascal, presente junto con otras componentes del jurado: Isabel Preysler, Cristina García Ramos, María Teresa Campos y Ana Rosa Quintana. Los micrófonos no funcionaban, la intérprete de Valentino hizo traducción libre y Pertegaz no se enteraba de nada. Aun así, pudo afirmar: "Del vestido de Letizia hoy no retocaría nada. Si acaso, el tiempo que hizo".

ENFERMERA PLAYERA Hay quien, tras iniciarse en los ritos de la realeza, se vuelve incapaz de codearse con la plebe. Pero Paloma Rocasolano, enfermera, sindicalista y madre de la princesa Letizia, es inmune a esa variedad del síndrome de Estocolmo que es el venido a más. La revista ¡Qué me dices! publica un reportaje playero de la madre de la futura reina de España, que visitó a sus padres, que viven en Alicante, y se los llevó a la playa. Ella misma cargó con la silla de cámping y las toallas.

ACTRIZ EXPUESTA "Véndelo todo. Nadie necesita mis cosas, es mejor que reciban el dinero". El deseo de Katharine Hepburn (1907-2003), repetido una y otra vez a su amiga periodista Cynthia McFadden, se cumplirá entre el jueves y el viernes, cuando la sede Sotheby´s subaste sus recuerdos. La recaudación, estimada en más de un millón de dólares será para su familia.