La última reencarnación de 007 aterrizó el lunes en Madrid para asistir anoche al preestreno de su última película, Evelyn . Por la mañana, Pierce Brosnan ejerció de hijo predilecto y, junto a su madre, paseó por el Madrid comercial. El actor compró en la boutique de Hermés y en otras de la llamada milla de oro, en el barrio de Salamanca.