De agosto a octubre, no es raro que a las comisarías se acerquen cazadores o senderistas para avisar de que, mientras estaban en el bosque, se han dado de bruces con una plantación de marihuana. Tampoco es raro el payés que ha encontrado ese particular cultivo en su campo de maíz. "Al aire libre, esos son los lugares donde se suelen hallar las plantaciones", comenta el subinspector Jordi Fadurdo, responsable del área de investigación de los Mossos en Lleida". "Nos encontramos con plantaciones en medio de los campos de maíz. Al ser una planta tan alta, tapa la marihuana e impide que se vea desde el suelo", añade.