El sector más estricto de la Unión Astronómica Internacional (UAI) se impuso ayer. Este organismo, en lugar de ampliar a 12 el número de planetas para justificar así el mantenimiento de Plutón, como proponía inicialmente su secretariado, lo ha reducido a 8. Tras una votación en la que participaron solo 300 de los 2.500 científicos asistentes, la 26 asamblea anual de la UAI reunida en Praga aprobó reducir la nómina considerar el cuerpo celeste descubierto por el estadounidense Clyde Tombaugh en 1930 como "planeta enano", una nueva categoría en el ránking astronómico.

Según la definición de la UAI, un planeta se define por estar en órbita alrededor del Sol, tener "suficiente masa para tener una gravedad propia" que le haya hecho tomar una forma redondeada y haber "despejado las inmediaciones de su órbita". En una segunda categoría están los "planetas enanos", que a diferencia de los anteriores "no han despejado las inmediaciones de su órbita y, a su vez, no son un satélite". Y en tercer lugar, los llamados "cuerpos pequeños del sistema solar", un cajón de sastre que agrupa a todos los demás.

El asteroide Ceres, que tiene forma más bien poliédrica; Plutón y Xena (o UB313), un cuerpo celeste descubierto en julio del 2003 por un equipo del Instituto Tecnológico de California, quedan fuera porque forman parte de cinturones de objetos menores. Los tres pasan a ser "planetas enanos", una categoría que la UAI espera ampliar "en próximos meses y años".

Muchos astrónomos ya habían expresado sus dudas durante años sobre que Plutón se considerara planeta. En su contra aducían su pequeño tamaño y que su órbita no coincida con el plano del resto de planetas y se solape con la de Neptuno, lo que puede indicar que fue un astro formado más tarde. También pesó en su contra el descubrimiento de la cantidad de otros cuerpos similares situados más allá de Neptuno (cinturón de Kuiper).

CON XENA LLEGO LA DECIDISION Ayer, la discusión sobre la categoría de Xena fue la que decantó la balanza sobre la consideración de Plutón.

La decisión de la UAI tendrá repercusiones en distintos ámbitos, en especial del ámbito educativo. Libros de texto, enciclopedias (aunque ayer por la tarde la Wikipedia ya recogía el cambio) y juegos tendrán que adaptar la nueva clasificación planetaria. Los planetarios, en cambio, lo ven más como un atractivo añadido para nuevas explicaciones.