El constructor Francisco Hernando, conocido como Paco el Pocero , confirmó ayer que abandona el proyecto del PAU de El Quiñón, en Seseña, con lo que será el ayuntamiento el que tenga que terminar las obras de urbanización que le había encargado.

En una carta remitida a los medios, el promotor extremeño hace un balance de las obras del Residencial Francisco Hernando, nombre con el que llamó a la urbanización de El Quiñón y en el que iba a construir unas 13.500 viviendas, de las que hay terminadas 5.600 y en las que habitan unos 2.300 vecinos.

La carta coincide con el cumplimiento del plazo de cinco años que se fijó en el convenio urbanístico firmado entre el ayuntamiento y la empresa de Hernando, Onde 2000, tiempo en el que el Pocero dice haber cumplido sus compromisos "hasta el punto en que nos ha sido posible".

Hernando culpa al alcalde de Seseña, Manuel Fuentes (IU), de paralizar el proyecto con trabas administrativas, de negarse a tramitar la certificación de obras y le reprocha que haya estado tres años sin hacer ninguna gestión para lograr el soterramiento de la línea de alta tensión y sin hacerse con los terrenos en los que la empresa iba a construir la carretera que uniría el Residencial con la A-4.s.

El alcalde, por su parte, aseguró a Efe que el constructor "ha dejado tirado" al ayuntamiento porque se negó a prevaricar al conceder las licencias de ocupación de viviendas que le exigía, y dijo que él se comprometió a entregar las licencias en cuanto estuviera garantizada la llegada del agua. El alcalde fue quien denunció ante la Fiscalía Anticorrupción la tramitación y aprobación del PAU.