La policía de Washington ha detenido esta madrugada al menos a 31 indignados que participaban en una nueva protesta del movimiento Occupy Wall Street y ha desmantelado una cabaña de madera que los manifestantes habían empezado a construir en el parque público en el que acampan desde hace meses.

Según el canal de televisión NBC, la policía dio a los indignados una hora para desmantelar la estructura "ilegal", pero estos rehusaron y un grupo se enfrentó a los agentes, que comenzaron los arrestos con ayuda de policía montada para contener a la muchedumbre. Los agentes acabaron desmantelando la cabaña, de unos 10 metros de alto.

La policía cerró las vías de acceso al parque McPherson Square, en el que se encuentran acampados desde hace meses en pleno centro de la capital estadounidense, a solo unos bloques de la Casa Blanca.

Se mantiene el campamento

Los detenidos serán acusados de haber "franqueado las líneas" policiales y de "desobedecer" a las fuerzas del orden, según ha señalado David Schlosser, responsable de la policía de Washington.

Pese al desmantelamiento de la cabaña, los indignados continúan acampados en la plaza. De hecho, la acampada de Washington es, junto a las de Boston y Pittsburgh, las únicas que, hasta ahora, han escapado del desmantelamiento total, al contrario de lo ocurrido en Nueva York, ciudad donde surgió el movimiento de protesta, en Los Ángeles y Filadelfia, donde las autoridades desalojaron los campamentos a mediados de noviembre,