Enrique Ponce, tras sufrir un grave percance mientras toreaba el lunes a su segundo toro de la corrida de Fallas, padece, tras los estudios a los que ha sido sometido por el doctor Zaragoza, además de la rotura del ligamento cruzado y del lateral interno de la rodilla izquierda diagnosticada ayer, una fractura de la séptima costilla y una fractura desplazada de la tibia.

Los médicos han asegurado que tendrá que estar de baja «como mínimo tres meses», lo que hacía descartar su presencia en la próxima feria de San Isidro, de Madrid, pero él mismo se ocupó expresó ayer su voluntad de mantener su contratación para la próxima feria de San Isidro, pese a la convalecencia que le han indicado los médicos, tal y como indica un comunicado de prensa emitido por las Ventas.