TSti el Porompompero , el método Rayas y el sagrado mantel de la Santa Cena fueran catalanes o vascos, ya se habrían convertido en señas de identidad nacional, en hechos diferenciales, en himnos patrióticos de las fiestas populares, en indicio de la sabiduría nacional del pueblo elegido para instruir al resto de la nación, en señal sacra de la predilección divina por el país catalán o euskaldún. Pero claro, como son de Cáceres, pues qué le vamos a hacer, se les da tan poca importancia que pasan desapercibidos y más que presumir de estas tres perlas, parece que las escondemos e incluso, lo que es peor, las ignoramos. Porque estoy seguro de que muchísimos extremeños desconocen el origen cacereño de estos tres iconos populares.

Sin embargo, ahí están: la canción del Porompompero como creación popular del cacereño maestro Solano, el método Rayas , popularizado y distribuido en toda España por Agustín Sánchez Rodríguez desde su imprenta de Serradilla, y el único mantel de la Santa Cena que se conserva (se guardan dos mesas de esa cena y hasta 60 dedos de san Juan Bautista), depositado en la Catedral de Coria. Con motivo de adorar el mantel se celebraba una peregrinación multitudinaria que la curia cauriense suprimió en 1791. Al maestro Solano nunca se le ha valorado en Cáceres y el método Rayas , aunque enseñó a escribir a 54 millones de españoles, nos debe de parecer cosa menor. En fin, no ser nacionalistas es un indicativo de salud mental, pero resulta triste que ensalcemos tan poco lo nuestro.