El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, ha asegurado que los controladores están en un "limbo legal" desde que el Gobierno decretara el estado de alarma el sábado y que solo hay un culpable de esa situación. "Es una situación totalmente anómala, consecuencia de un caos que se podía haber evitado y que tiene un solo culpable", ha señalado el portavoz de los controladores en el muro de su página de Facebook. Por este motivo, los controladores han decidido ser "prudentes" y no hacer declaraciones hasta que los abogados aclaren la situación en la que se encuentran dentro de ese "limbo legal".

También Cabo ha calificado de "desmedida" la reacción de los controladores, que se ha producido "provocada por meses de acoso, una ley y varios decretos" que recortan los derechos del colectivo. Para el portavoz, el conflicto se ha originado después de quitar a los controladores "un convenio" y tras una campaña brutal de meses "de desprestigio en contra de la profesión".

Cabo ha asegurado, además, que los controladores solo piden estabilidad laboral y que cese el acoso y la discriminación contra ellos.

"LA GOTA QUE COLMA EL VASO"

Por su parte, la Federación de Sindicatos Aeronáuticos Independientes (FSAI) ha censurado la "provocación y manipulación" del Gobierno por la aprobación de un real decreto "que vulnera los derechos" de los trabajadores de AENA y de los controladores al comienzo de un periodo vacacional como el puente de la Constitución.

El sindicato lamenta en un comunicado que AENA y el Ministerio de Fomento "hayan hecho uso de su poder ante los medios para terminar de hundir la ya maltrecha imagen de los controladores", y considera que los hechos que han llevado al cierre del espacio aéreo español "han sido la gota que ha colmado el vaso de una serie de despropósitos".

En su opinión, el Gobierno "para conseguir su propósito de allanar el terreno a la privatización" de AENA "ha tomado como rehenes a los ciudadanos españoles en el momento en que iniciaban sus vacaciones".