Dirigentes del Partido Popular (PP) expresaron ayer su "indignación" después de que la ministra de Sanidad, Elena Salgado, insistiera en que no ha existido una crisis alimentaria (puesto que de inmediato se detectó el origen y el producto causante del brote) y por haber esperado hasta ayer para hablar en público de la intoxicación cuando ésta se inició el 28 de julio. La portavoz adjunta del PP en la Comisión de Sanidad del Congreso, María Mercedes Roldós, recomendó a la ministra que "se marche a casa" y pidió al presidente del Gobierno que le releve porque, a su juicio, "no le importa la salud de los ciudadanos".

La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) ha calculado que la indemnización que el Grupo Sada --propietario de las instalaciones en las que se contaminaron los pollos-- debe pagar a los más de 2.000 afectados por la contaminación asciende a unos 660.000 euros. La entidad considera que, en el caso del único fallecido por la intoxicación, la indemnización dependerá de si existe un acuerdo amistoso.