Viagra, el mítico producto contra la disfunción eréctil que ha revolucionado las terapias sexuales, no solo tiene competidores que emplean otros mecanismos para conseguir la misma meta. Cumplidos ya los 10 años de una comercialización sin precedentes --1.800 millones de comprimidos (34 millones en toda España) y 1.200 millones de euros de beneficios-- y extinguida su patente, a la popular pastilla azul le ha salido un clon, aunque de color blanco: Vizarsin.

Se trata del primer genérico del principio activo sildenafilo que el laboratorio catalán Kern Pharma ha puesto en venta en las farmacias a un precio un 30% más barato (unos cinco euros menos) que la pastilla azul original. Un comprimido cuesta 10,2 euros y una caja de cuatro unidades, 36 euros.

POR UNIDAD Y CON RECETA El éxito no se ha hecho esperar. Un mes después de su lanzamiento en el mercado se han vendido ya más de 50.000 comprimidos, según el laboratorio, líder en producción de genéricos en España y radicado en Terrassa (Barcelona). Y ello a pesar de que se trata de un medicamento que precisa receta del principio activo. En caso contrario, al no estar financiado por el sistema público, los farmacéuticos no pueden administrarlo con las antiguas recetas y solicitan una específica. "Algunos ya se han aprendido bien el nombre, pero sin receta del principio activo no podemos dispensarlo. No es complicado pedirle al médico una nueva", sostiene con cierta ironía Julia López, encargada de una farmacia madrileña.

ALGUNAS VENTAJAS Además de tener un precio inferior, el nuevo comprimido presenta la ventaja, según afirma la compañía farmacéutica y los mismos pacientes, de ser más "manejable", puesto que cuenta con dos formatos exclusivos (en cajas de una sola unidad o de 12) para adaptarse mejor a las necesidades de cada paciente. También se vende en envases de cuatro y ocho pastillas, los más usados por los compradores de Viagra, presentada por la multinacional Pfizer en 1998.

Vizarsin fue autorizado el pasado mes de noviembre por la agencia europea del medicamento (EMEA) y el Ministerio de Sanidad. "Los efectos y la ayudita son idénticos. La principal diferencia se nota en el bolsillo", coincidieron en afirmar Jaume San Martín y Antonio Pérez, usuarios de la nueva versión genérica del fármaco oral, que actúa sobre una enzima específica y produce el efecto físico de la erección con estimulación sexual previa.