La misión española en la base Gabriel de Castilla en la Antártida y el astronauta Miguel López Alegría, de raíces extremeñas, han protagonizado la primera conexión de la historia entre el Polo Norte y el espacio. El jefe de la misión, el comandante Rafael Ayora, explicó que la conexión entre la base y la Estación Espacial Internacional (ISS), en la que López Alegría está desde el mes de septiembre, fue a las 16.33 horas (20.33 hora peninsular) del pasado 8 de enero y "constituyó todo un éxito".

Durante media hora los miembros de la expedición tuvieron ocasión de preguntar a López Alegría, de origen español y nacionalizado estadounidense, acerca de varias cuestiones, una comunicación en la que también intervinieron integrantes de la expedición Inmovell, de Castilla-La Mancha.

El equipo de la Campaña Antártica 2006-2007 le preguntó a López Alegría por cuestiones científicas y él les mostró la nave y demostró con ejemplos prácticos cómo es la vida diaria sin gravedad. La videoconferencia fue supervisada por el nodo central de telemedicina de la Defensa, situado en la sede de la Empresa Comitas en Tres Cantos (Madrid), así como por el Johnson Space Centre de Houston.