El juez Fernando Andreu ha decretado prisión provisional para el pederasta Daniel Galván, detenido ayer en Murcia tras ser revocado su indulto en Marruecos, ante el riesgo de fuga y la gravedad de la pena impuesta (30 años de cárcel), mientras se decide si cabe o no su extradición a Marruecos.

Andreu ha asumido así la petición que en este sentido le ha hecho el fiscal de la Audiencia Nacional Pedro Martínez Torrijos tras tomar declaración durante tres cuartos de hora a Galván, que se ha negado a ser extraditado y ha invocado su arraigo en España por sus amistades y por tener una casa en Torrevieja (Alicante).

El juez considera sin embargo en el auto de prisión que Galván "carece de arraigo, familiar, social económico o de otro tipo que neutralice la tentación de ponerse fuera del alcance" de la Justicia.