Por tradición e historia, en Montánchez el jamón es el rey, pero la singular localidad cacereña esconde más, mucho más, relacionado con la alimentación. En Montánchez tienen la posibilidad de formarse sin coste alguno aquellos que quieren ser profesionales vinculados a las industrias cárnicas.
Las condiciones son favorables. Un puesto de trabajo posterior, seguro. "Hasta día de hoy, el número de ofertas que nos llegan es superior al de titulados", se enorgullece Aurelia Martín, jefa del departamento de Industrias Alimentarias del ciclo formativo de grado medio de matadero-carnicería-charcutería del IES Sierra de Montánchez. Este centro aparece como alternativa válida y práctica para aquellos que quieran dedicarse a las industrias cárnicas, en las más diferentes ramas. Es el único en Extremadura que oferta esa posibilidad gratuitamente para un sector donde, en la Extremadura actual, se demandan muchos profesionales cualificados.
Las asignaturas, que pueden cursar aquellos que tengan el título de la ESO, son ocho: sacrificio y faenado de animales y asistencia en la inspección; despiece y carnicería; charcutería; operaciones y control de almacén; higiene y seguridad en la industria alimentaria; administración, gestión y comercialización en la pequeña empresa; tecnología de la carne y formación y orientación laboral.
El ciclo se imparte en horario escolar (8.20-14.25) durante un curso lectivo. Los módulos se dan en un obrador ubicado en el propio instituto, en el que se cuenta con la maquinaria y utensilios necesarios para despiezar, filetear, envasar y elaborar productos. Un día a la semana, se desplazan al matadero municipal para sacrificar a los animales que utilizan para realizar el resto de prácticas.
Como estudiantes, en el primer curso lectivo y tras haber superado los correspondientes exámenes, se incluirán en el módulo ´Formacion de Centros de Trabajo´ o, según dicen en el centro, "lo que siempre se ha conocido como prácticas en empresa". El instituto nombra a un tutor que buscará una empresa y hará el seguimiento en los tres meses posteriores. En el IES celebran lo más importante a efectos prácticos: "el objetivo es que se integre en el mundo laboral y complete su formación. Con esta experiencia, además de aprender, tienen la oportunidad de dejar su mejor tarjeta de presentación, que son ellos mismos, ya que muchos de ellos son contratados por la misma empresa, o en el peor de los casos siempre podrán dar referencias de ellos a otras empresas del sector".
Puede que las mejores hamburguesas que se pueden comer en la comunidad hayan sido elaboradas con el esmero de los alumnos en una formación bajo supervisada por profesionales. El futuro del sector cárnico está en esta alternativa.
