La congregación de los Legionarios de Cristo nació para ser líder. Así se lo pidió, en 1948, el papa Pío XII al joven sacerdote Marcial Maciel Degollado. Siete años antes, Mon P¨re, como se hace llamar Maciel, había fundado con solo 21 años una congregación religiosa entre un grupo adolescentes. Maciel consiguió la demanda de Pío XII y la superó con creces.

Los Legionarios de Cristo es una de las congregaciones más influyentes en el Vaticano y su fundador estuvo muy cerca de Juan Pablo II, quien llegó a poner al mexicano como "ejemplo del trabajo pastoral en favor de la expansión del Reino de Dios". Cuenta con más de 500 sacerdotes, 2.500 seminaristas y un ejército de 50.000 miembros del Regnum Christi (el brazo secular).

La orden, considerada como una de las más conservadoras de la Iglesia católica, se ha enfocado siempre "en la predicación del Evangelio, la formación integral de los niños y jóvenes, la defensa de los valores familiares y la ayuda a los pobres". Además, administra escuelas de élite en Brasil, Chile, México, Venezuela, España, EEUU, Irlanda e Italia.