Dos mil ovejas merinas son protagonistas de una trashumancia pionera al recuperar todo el itinerario de una vía pecuaria de hace medio siglo, que discurre por Extremadura, Avila, Soria y Segovia.

La iniciativa, que comienzó ayer, domingo, con la salida del rebaño desde La Serena (Badajoz), une dos comarcas de "máximo interés ambiental" para la conservación de especies esteparias en Extremadura y eurosiberianas en las montañas de La Demanda, en el límite de Burgos con Soria y la Rioja, informa el presidente de la Asociación Concejo de la Mesta, Jesús Garzón,

Con esta ruta se pretende demostrar también que se trata de una actividad social y económicamente sostenible, porque ofrece al ganadero independencia y autonomía frente al elevado precio de los piensos.

El proyecto contribuye asimismo a la conservación de la ecología y la biodiversidad porque los pastizales son los mejores sumideros de carbono a nivel mundial y pone en valor el medio rural.

Hasta el siglo XIX, unos cinco millones de cabezas de ganado marchaban cada año hacia las montañas, principalmente ovejas pero también cabras, vacas y otros animales, entre abril y mediados de mayo, época en la suele empezar la sequía estival en el sur de España y regresaban en noviembre.