Las cinco familias catalanas que se desplazaron a la República del Congo para culminar sus procesos de adopción han regresado hoy al aeropuerto de El Prat, donde se han reencontrado con decenas de familiares que les esperaban. Cuatro de las familias han llegado a Barcelona con sus niños, si bien uno de los padres adoptivos ha regresado solo, ya que antes de iniciar el viaje se supo que el padre biológico del menor no había renunciado a su tutela y que el pequeño no podía ser adoptado.

Las cinco familias se desplazaron al Congo hace unos dos meses para agilizar los procesos de adopción de sus hijos, que les habían sido asignados hace casi un año pero cuyos trámites adoptivos estaban paralizados. El parón en el papeleo se debió a los problemas burocráticos que el pasado verano sufrieron otras familias españolas para sacar de ese país a sus hijos adoptados, después de que el gobierno africano y la embajada española consideraran que no había garantías suficientes de que los padres biológicos habían renunciado a su custodia.

Ello provocó que todos los procesos de adopción pendientes con el Congo en su capital Brazaville -quince en total- quedaran paralizados, no así los tres abiertos en Kinshasa, en la República Democrática del Congo. Familiares y amigos han soportado una larga espera esta mañana, ya que la llegada del vuelo estaba prevista para las 11.50 horas, pero los menores y sus padres no han aparecido en el vestíbulo de la terminal-A hasta las 13.22 horas porque el avión ha partido de la capital de Brazaville con retraso y han perdido el enlace vía París.

"Bienvenido a casa, Moïse" y "Bienvenida Anna Patrice" han sido dos de las pancartas con las que los familiares han saludado la llegada de los cuatro padres adoptivos. Los parlamentarios de CiU Josep Maldonado y Josep Lluís Cleries también se han desplazado hasta el aeropuerto para recibir a las familias por razones "de amistad y de solidaridad". Sònia Mellado y Pep Plaza, residentes en Arenys de Munt (Barcelona), han adoptado a Teo, de 2 años. Josep Maldonado ha desvelado que será su padrino y, "como primer regalo", ha anunciado que lo hará socio del Barça.

La pareja formada por Miquel Julià y Claudia Górriz, que viven en Arenys de Mar (Barcelona), han adoptado a Moïse, de un año y medio, Natividad Aguilera, de l'Hospitalet, ha llegado con su hija Anna Patrice y los barceloneses Oriol Suárez y Meritxell Grabuleda han decidido poner el nombre de Guillem a su hijo recién adoptado. Al llegar a El Prat, todos han atendido a los numerosos medios de información que les esperaban en el vestíbulo de la terminal.