El camino de Santiago acogió ayer a una de las más ilustres visitantes del año: la reina Sofía, que recorrió, con banda sonora improvisada de gaitas y muñeiras, los cinco kilómetros anteriores al Monte del Gozo en Compostela, una experiencia que calificó de "fantástica y maravillosa". La Reina acompañó ayer, a las 11.30, a los 350 representantes de la Guardia Real española y de otros países como Bulgaria, la República Checa e Italia, en el tramo final de su peregrinación.

Vestida con pantalones de bolsillos y camisa color caqui, un pañuelo azul al cuello, gafas de sol colgadas en la blusa, botas de montaña y un informal bolso de lana de rayas de colores, la Reina emprendió el camino a unos 10 minutos por kilómetro, ayudada por un bastón de peregrino que tenía la clásica calabaza. La Reina, que elogió la experiencia peregrina, no pudo completar el tramo hasta la catedral de Santiago de Compostela a causa de su apretada agenda.

KURNIKOVA, EN LAS GRADAS Ahora que Maria Sharapova no sólo gana el Wimbledon sino también la plaza de tenista-rusa-sex-symbol, Anna Kurnikova hace imaginarias en las gradas, acurrucada por Enrique Iglesias, con el que ayer vio un partido de Agassi en Los Angeles.

EL CLAN PRESLEY Aunque parezcan Los ángeles de Charlie, Priscilla Presley, Riley Keough y Lisa Marie Presley son la exesposa, nieta e hija, respectivamente, del rockero. Y las tres generaciones del clan dicen llevar muy bien la fama --aunque las dos mayores no puedan decir lo mismo de sus carreras-- en el número del mes de agosto de Vogue, que ha elevado al trío hasta su portada. "Para mí, mi mamá no es famosa, es sólo mi mamá", dice Riley, que a los 15 años se ha estrenado como top-model a las órdenes de Dolce&Gabbana.