Los trabajadores sanitarios con el virus de inmunodeficiencia adquirida (VIH) no verán limitada su actividad profesional a partir del próximo año en Inglaterra, Escocia y Gales. El Gobierno del Reino Unido anunció ayer la eliminación de las restricciones implantadas en 1993 a enfermeros, cirujanos y dentistas portadores del virus, por las que no podían ejercer determinadas labores médicas y que se fundamentaron en el temor al contagio a los pacientes.

La decisión se basa en el avance científico y la efectividad de los tratamientos, que permiten a los portadores del virus "vivir tanto como cualquier otra persona" y "sin temor a contagiar a sus compañeros", explicó Sally Davies, asesora médica del Ejecutivo británico. "Con tratamiento, los niveles del virus en la sangre son demasiado bajos para que se transmita", subrayó.

Hasta ahora, en el Reino Unido, cualquier profesional médico que portara el virus tenía prohibido participar en procedimientos en los que su sangre pudiera entrar en contacto con los pacientes o se utilizaran instrumentos afilados. Este tipo de restricciones, inexistentes en España, siguen vigentes en Australia, Irlanda, Italia y Malta.

MAS IMPROBABLE QUE UN RAYO "Solo existen cuatro casos conocidos en los que un doctor haya infectado a un paciente y ninguno ha sido en el Reino Unido. Además, en estas ocasiones coincidió que el médico no estaba sometido a ningún tratamiento", explicó Davies. "Hay más probabilidades de ser alcanzado por un rayo que de ser contagiado del virus del VIH por un médico", apuntó.

En el año 2007, se formó un equipo de expertos destinado a asesorar a los dirigentes británicos sobre la adecuación de las restricciones y en el 2011 aconsejaron su eliminación, que no será efectiva en su totalidad hasta abril del 2014. No obstante, los sanitarios con VIH deberán apuntarse en un registro y someterse a controles médicos cada tres meses para cerciorarse de que siguen el tratamiento correcto y de que su carga viral es indetectable.

CARRERAS TRUNCADAS La norma ha pervivido en el Reino Unido durante 20 años, obligando a muchos cirujanos a cambiar de disciplina y a muchos dentistas, directamente, a dejar su carrera y buscarse otra profesión. En la actualidad hay 110 profesionales con VIH trabajando en el sistema público de salud británico. "Hemos avanzado desde la década de los 80, cuando el sida siempre era letal y las campañas gubernamentales solo advertían a la población de los peligros de la enfermedad", manifestó la asesora médica del Ejecutivo británico, a la que preocupa que "la gente todavía no esté al corriente de la realidad de los tratamientos para el VIH".