La madre del niño de 3 años que cayó al foso del gorila Harambe del zoo de Cincinnati que tuvo que ser abatido por sus cuidadores del parque para salvar la vida del pequeño ha quedadolibre de cargos, según ha anunciado este lunes el fiscal del caso. Tras la polémica suscitada por la muerte del gorila, la policía llegó a abrir una investigación criminal para dilucidar si la madre había sido responsable de los hechos por no cuidar de su hijo y dejar que este entrara en el recinto del animal.

Harambe, el gorila de 17 años, de espalda plateada, fue disparado por personal del zoológico en los primeros minutos después de que el niño se cayera al foso el pasado 28 de mayo, provocando una tormenta de críticas dirigidas tanto al zoológico y la madre del niño.

La policía y los fiscales no proporcionaron el nombre de la madre, pero varios informes de los medios la identificaron como Michelle Gregg, de 32 años y trabajadora en una guardería.

CONMOCIÓN CEREBRAL Y RASGUÑOS

El niño sufrió una conmoción cerebral y algunos rasguños. La familia nunca ha tenido la intención de demandar al zoológico.

"Lo siento mucho por la pérdida de este gorila pero nada de lo sucedido es una infracción penal", ha defendido el fiscal Joseph Deters. "Si la madre hubiera estado en el baño fumando crack y hubiera dejado a sus hijos corriendo solos por el zoo eso hubiera sido otra historia". "Según los testigos, ella estuvo atendiendo a sus otros tres hijos", ha dicho Deters.

"Si alguien cree que un niño de 3 años no puede irse corriendo muy rápido es que nunca ha tenido hijos, ya que estos pueden y lo hacen a menudo", ha argumentado.

BARRERA MÁS ALTA

El fiscal también ha explicado que se congratula de que el zoológico haya cambiado el recinto de los gorilas para evitar que se repita otro incidente similar. La zona volverá a quedar abierta al público desde este martes con una barrera superior más alta.

La familia se ha mostrado satisfecha con la decisión del fiscal.

"Con esta decisión podemos dejar atrás este trágico episodio y volver a la normalidad", ha expresado la familia en un comunicado.

El niño estaba en el zoológico con su madre, y tres hermanas más de 7, 4 y 1 años, y con varios amigos de la familia cuando sucedió el incidente: el niño se subió a la barrera y cayó al faso.

El gorila arrastró al niño a través del recinto antes de que los funcionarios del zoológico le dispararon.